Masako
Owada Masako, nacida en Tokio el 9 de diciembre de 1963, fue una niña criada de forma cosmopolita al ser su padre un famoso diplomático que pasaba largas temporadas en diferentes países. Terminó sus estudios de economía en diferentes universidades de E.E.U.U. con calificaciones a lo "magna cum laude super ultra math 3 turbo champion" y habla con fluidez el ruso,el inglés, el francés y el aleman (ademas del japonés, supongo), habiendo trabajado de intérprete para personajes como Boris Yeltsin o Bill Clinton (no sabemos si como becaria).El caso es que la pobre muchacha, tras rechazar dos veces al príncipe Naruhito, próximo emperador de Japón, acepto su proposición para casarse el 9 de junio de 1993. Desde entonces se ha convertido en una especie de princesa Diana a lo japonés, y es que la prensa no le quita el ojo.
Tras tener un aborto y sometida a intensos tratamientos de fertilidad, la princesa Masako tuvo una niña el 1 de diciembre de 2001, la princesa Aki, hecho que ha reabierto otra grave polémica porque en Japón existe una especie de "Ley Salica" como en España, que impide que las mujeres lleguen al cargo de "Emperadoras". Por aquel entonces la muchacha ya sufría de crisis de depresión y estrés que se verían agravadas por la presión de la casa real y la decepción del principe Naruhito por no poder tener hijos, y son continuos los rumores de separación. Existe la posibilidad de la adopción de un niño de una rama de la familia que dejo el trono tras la Segunda Guerra Mundial, pero parece que la mayoría de los japoneses desean que la ley salica se derogue y la princesa Aki puena ser la siguiente heredera al trono.
Para una información más detallada, hace poco se ha publicado un libro biográfico de Masako en castellano donde explican, no solo los abatares de esta mujer, sino las costumbres y rituales por los que ha de pasar un miembro de la familia real japonesa.
El libro de marras.
Etiquetas: literatura, personajes
2 comentario(s):
Perdón por lo puntilloso pero a lo mejor te refieres a "emperatriz" con el tema. Aparte de eso, me parece interesante la resonancia que tiene lo de una mujer en el Trono Imperial y las primera gobernante de Yamato (no recuerdo su nombre). Si las cosas van así supongo que puede producirse una verdadera reforma en Japón.
Por Illuminatus, a las 7:30 p. m.
XD, al final voy a tener que instalar el corrector ortográfico.
Por Felipe, a las 12:55 p. m.
Escribe un comentario
<< Página principal